UC - Críticas
| Países: España, Francia y Bolivia. |
Interpretación: Sam Shepard (James Blackthorn), Eduardo Noriega (Eduardo Apocada), Stephen Rea (Mackinley), Magaly Solier (Yana), Nikolaj Coster-Waldau (James de joven), Padraic Delaney (Sundance), Dominique McElligott (Etta). |
EL HONOR DEL PISTOLERO
"Balckthorn (Sin Destino)" es un inesperado y gratificante film que recupera el espíritu del western crespuscular que tantas buenas obras nos había ofrecido en el pasado por autores que van desde Sam Peckinpah hasta Clint Eastwood. Pero eso era antes y aunque hace unos años el género se avivó ligeramente, parece que es un género abocado a la desaparición de forma incomprensible en los nuevos tiempos, como demuestra la indiferencia del público ante esta excelente película española.
Tras haber huido de Estados Unidos, el legendario forajido Butch Cassidy murió en Bolivia en 1908, tiroteado junto a su amigo Sundance Kid. Esto es lo que dice la versión oficial. En “Blackthorn (Sin destino)” veremos que lo cierto es que ha pasado veinte años escondido y ahora quiere volver a casa. Sin embargo, pronto encontrará en su camino a un joven ingeniero español que acaba de robar la mina en la que trabajaba y que pertenece al empresario más importante de Bolivia.
"Balckthorn" funciona como un clásico del género y la mirada de Mateo Gil recupera la poética y mística del oeste, donde los códigos de honor y respeto prevalecían incluso entre los bandidos, pero que el progreso fue algo que también se llevó poco a poco consigo. Es cierto que el director pierde el pulso narrativo en algunos momentos muertos que perjudican a la historia y que la transición entre los flashbacks y el tiempo presente no siempre es lo fluída que debería, pero el film contiene grandes secuencias que rayan sin complejos a la altura de los clásicos del western (en este sentido me parece muy superior al remake de los Coen de "Valor de Ley", por ejemplo) y además ofrece algunos toques distintivos que no saben a copia ni a lugares comunes del género como podría pensarse a priori.
Además, supone todo un acierto contar con Sam Shepard como protagonista de la función y que está simplemente soberbio encarnando a un viejo y entrañable Butch Cassidy, el mítico pistolero. El guión sabe conjugar una historia alejada de heroismos futiles para centrarse en unos personajes que buscan su lugar en un mundo tan convulso, donde también hay cabida para el honor y la amistad, un mundo a menudo cruel pero retratado con admiración y devoción por Gil como si deseara haber vivido en esa época. "Blackthorn" es un western impecable a reivindicar y encima español, aunque esté grabado casi integramente en inglés.
